No te asustes si escuchas un susurro en tu oído,
O sientes que una mano acaricia la tuya
No te sorprendas si al despertar intuyes
Que una sombra ha besado tus mejillas.
O sientes que una mano acaricia la tuya
No te sorprendas si al despertar intuyes
Que una sombra ha besado tus mejillas.
Volé hacia ti en madrugada cristalina
Ligera como ave del paraíso
Para rozar tu aura con dedos transparentes
Y rebosar tu copa de doradas burbujas de alegría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario