Hagamos un ejercicio.
Sabemos que el ambiente ayuda a conseguir un estado de paz y armonía interior, y es por ello por lo que el ritual del comienzo de los ejercicios es muy importante. El primer paso, por lo tanto será haber creado un ambiente agradable, bien ventilado, con aroma de incienso o esencia de la que más nos guste. Escogeremos una música adecuada en cada caso, que nos ayude a alcanzar un estado de meditación, es decir, a conectar con nuestro ser interior, a localizarnos en el momento presente, en el aquí y ahora intemporal.
En segundo lugar, una vez creado el ambiente adecuado, practicaremos unos minutos de movimientos para "desentumecernos" (podemos practicar una meditación dinámica o un poco de danza suave, depende de como nos sintamos). Esta práctica se hará siempre antes de cada ejercicio. Nuestra misión será soltar. Soltar los malos rollos, las malas energías adheridas durante el día,... movemos brazos y piernas, nos agitamos como para desprendernos de algo que se nos ha pegado... nos limpiamos bien y quedamos libres.
En tercer lugar, deapués de la danza, unos segundos de relajación y de sentir el fluir de la energía en nuestros cuerpos. Después, nos sentaremos frente a un compañero (o arrodillados cómodamente en el suelo sentados sobre los talones), o a un espejo en el caso de no tener a nadie para realizarlo. Nos miramos a los ojos y nos relajamos. Abrimos la mirada (eso quiere decir no focalizar, no esperar ver nada, sino simplemente dejarse fluir, dejarse ser sin condicionamientos. Manda al ego a paseo por un rato).
Nos tomamos de las manos en actitud relajada, dejándonos fluir, soltando tensiones... Después de unos segundos, se trata de comenzar frases con "yo soy", sin pausa, sin pensar, tal y como van saliendo... Primero uno, y transcurridos un par de minutos, el otro.
Después del ejercicio, realizamos una meditación.
Yo soy. Yo soy todo lo que existe. Todo lo que existe está dentro de mi. Soy parte de un Todo. Yo soy tu. Yo soy luz. Yo soy noche. Yo soy día. Yo soy agua. Yo soy tierra. Yo soy lobo. Yo soy lluvia. Yo soy triste... Yo soy alegre... Yo soy arbol, Yo soy mar,...
Sabemos que el ambiente ayuda a conseguir un estado de paz y armonía interior, y es por ello por lo que el ritual del comienzo de los ejercicios es muy importante. El primer paso, por lo tanto será haber creado un ambiente agradable, bien ventilado, con aroma de incienso o esencia de la que más nos guste. Escogeremos una música adecuada en cada caso, que nos ayude a alcanzar un estado de meditación, es decir, a conectar con nuestro ser interior, a localizarnos en el momento presente, en el aquí y ahora intemporal.
En segundo lugar, una vez creado el ambiente adecuado, practicaremos unos minutos de movimientos para "desentumecernos" (podemos practicar una meditación dinámica o un poco de danza suave, depende de como nos sintamos). Esta práctica se hará siempre antes de cada ejercicio. Nuestra misión será soltar. Soltar los malos rollos, las malas energías adheridas durante el día,... movemos brazos y piernas, nos agitamos como para desprendernos de algo que se nos ha pegado... nos limpiamos bien y quedamos libres.
En tercer lugar, deapués de la danza, unos segundos de relajación y de sentir el fluir de la energía en nuestros cuerpos. Después, nos sentaremos frente a un compañero (o arrodillados cómodamente en el suelo sentados sobre los talones), o a un espejo en el caso de no tener a nadie para realizarlo. Nos miramos a los ojos y nos relajamos. Abrimos la mirada (eso quiere decir no focalizar, no esperar ver nada, sino simplemente dejarse fluir, dejarse ser sin condicionamientos. Manda al ego a paseo por un rato).
Nos tomamos de las manos en actitud relajada, dejándonos fluir, soltando tensiones... Después de unos segundos, se trata de comenzar frases con "yo soy", sin pausa, sin pensar, tal y como van saliendo... Primero uno, y transcurridos un par de minutos, el otro.
Después del ejercicio, realizamos una meditación.
Yo soy. Yo soy todo lo que existe. Todo lo que existe está dentro de mi. Soy parte de un Todo. Yo soy tu. Yo soy luz. Yo soy noche. Yo soy día. Yo soy agua. Yo soy tierra. Yo soy lobo. Yo soy lluvia. Yo soy triste... Yo soy alegre... Yo soy arbol, Yo soy mar,...
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