jueves, 10 de julio de 2008

Dar de beber al sediento





Dar de beber al sediento...

Rafa, una vez escribiste algo en el foro que se me quedó gravado, quizás porque acababa de ver la película de Bab Aziz y pude obtener la imagen de mi registro, al tiempo que leía tu aporte.

Contabas algo sobre la misión que cada uno desempeñamos en la vida, que a veces puede tratarse simplemente de ofrecer un vaso de agua en algún momento a alguien que esté sediento… Tuve entonces la visión de Bab Aziz caminando por el desierto, y recordé la escena en la que un hombre, un pobre loco, ofrecía agua a otro que estaba a punto de morir, desmayado a pleno sol del desierto… Me quedé cavilando sobre eso… toda una vida merece ser vivida si en un momento puedes dar agua a alguien que tiene sed y salvarlo, pues estaba previsto que así fuera, que estuviera uno ahí, en ese momento, sin saberlo, pero con una misión encomendada ya de antemano: dar de beber al sediento…

Luego recordé la frase que dice algo así como que nos e mueve ni una sola hoja de un árbol sin la voluntad divina. Cerré los ojos y por un momento fui hoja que cae del árbol…

Es una meditación que me acompaña últimamente cada vez más; que me hace recordar que soy una caña de bambú por la que sopla el espíritu divino, y es liberándome de mis “ideas” sobre cómo me gustaría que fueran las cosas, como conecto con ese fluir del Ser, con esa laxitud que llena mi pecho de dicha por existir y formar parte de todo lo que existe.




1 comentario:

Anónimo dijo...

A mi me parecio muy interesante lo que te paso...es qyo estaba investigando sobre eso y me gusto ..bueno pz la frase q pusite me encanto asi q ..gracias.